Con el paso del tiempo, las generaciones cambian, y con ellas, sus valores y percepciones. Un ejemplo de ello es el estudio realizado por la periodista Rosie Hewittson en el Reino Unido, en el cual pidió a un grupo de adolescentes ver la película American Pie para conocer sus opiniones al respecto.
La saga, compuesta por comedias se3uales, fue muy popular entre adolescentes desde su primera entrega en 1999. La trama principal gira en torno a un grupo de jóvenes que hacen un pacto para perder la virginidad antes de graduarse.
Los jóvenes participantes en el estudio, de entre 16 y 19 años, destacaron aspectos negativos de la película, como el tratamiento despectivo hacia las mujeres y la falta de consentimiento en ciertos actos se3uales. Estos temas han tomado mayor relevancia en los últimos años debido a una creciente conciencia social sobre el respeto y la igualdad de género.

Un ejemplo específico de las preocupaciones de los adolescentes es la escena en la que Jim intenta transmitir en vivo su encuentro con Nadia, sin que ella sepa que hay una cámara oculta grabándola desnuda. Hanna, de 17 años, mencionó que la película no cuestiona la moralidad de estos actos, que constituyen una violación de la privacidad y un delito se3ual.
El estudio también destaca la diferencia en la percepción del humor entre generaciones. Lo que antes se consideraba gracioso y entretenido, ahora puede ser visto como ofensivo e inapropiado. Esto demuestra cómo la sociedad ha evolucionado en términos de valores y expectativas en cuanto al contenido de las películas.
En resumen, las nuevas generaciones consideran inapropiado e incómodo un filme que hace 20 años gozaba de gran popularidad, lo que refleja un cambio en la percepción y valores de la sociedad. A pesar de que hay quienes argumentan que la película es un producto de su tiempo y no debería juzgarse con los estándares actuales.

el estudio de Hewittson ilustra la importancia de revisar y analizar el contenido pasado para comprender mejor cómo ha cambiado la cultura y la mentalidad en las últimas décadas.
El debate sobre si películas como American Pie deberían ser canceladas o no sigue siendo un tema de discusión, pero lo cierto es que el estudio de Hewittson ha abierto un espacio para reflexionar sobre cómo el entretenimiento puede impactar en la percepción de temas importantes como el consentimiento, la privacidad y el respeto hacia las mujeres.