Una escena desconcertante en la Pasión de Cristo
La Pasión de Cristo, una película dirigida por Mel Gibson, ha sido objeto de múltiples interpretaciones y debates desde su lanzamiento en 2004. Una de las escenas más enigmáticas y perturbadoras muestra a Satanás sosteniendo a un “bebé demonio” mientras Jesucristo está siendo flagelado.
El mensaje detrás de la aparición del “bebé demonio”
La escena tiene un significado profundo y simbólico: Satanás muestra a Jesús que, incluso siendo “el Diablo”, protege y cuida a su hijo, mientras que Dios permite que su propio hijo sea torturado cruelmente. Este momento pretende resaltar la naturaleza despiadada de la crucifixión y el sufrimiento extremo que Jesús tuvo que soportar.
La figura andrógina de Lucifer
En la película, Lucifer es representado por una figura andrógina, ya que, según la teología cristiana, los ángeles no tienen género. El personaje de Lucifer aparece en varias escenas clave del calvario de Jesús antes de su crucifixión en el Gólgota.

El impactante aspecto del “bebé demonio”
El “bebé demonio” se presenta cubierto por una manta negra en los brazos de Satanás. Al revelar su rostro, muestra una apariencia demoníaca: sin cabello, rasgos marcados, vestimenta oscura y una risa macabra. La escena captura la atención de los espectadores y provoca escalofríos en muchos de ellos.
Reflexión sobre la naturaleza del mal y el sufrimiento
La escena del “bebé demonio” en la Pasión de Cristo invita a reflexionar sobre la naturaleza del mal y el sufrimiento en la experiencia humana. A través de este simbolismo perturbador, la película busca transmitir la magnitud del dolor que Jesús sufrió por la humanidad y cuestionar la relación entre el bien y el mal.
Descubre más sobre esta escena en el video del “bebé demonio de la Pasión de Cristo”.